Son las 8.30 de la mañana y los motores ya están encendidos; con toda su tripulación a bordo la draga Ernesto Pinto, como cada mañana, zarpa desde el muelle fiscal de la Dirección de Obras Portuarias en el sector General Lagos, para iniciar una nueva jornada de trabajo, en el marco del dragado del río Valdivia y sus afluentes, proyecto liderado por la DOP del Ministerio de Obras Públicas de Los Ríos.
En su décimo mes de ejecución, las faenas se concentran en el dragado del punto 1, el denominado sector de la Boya Alfa en la bahía de Corral, trabajos que permitirán recuperar definitivamente los tracks de navegación, para embarcaciones de mayor calado, que necesiten viajar por la zona y que hace mucho tiempo están restringidas, producto del embancamiento del río y el arrastre de sedimentos.
El objetivo es mantener la cota de calado máximo permitido por la autoridad marítima de nuestro país, que alcanza los 3,80 metros en todos los sectores identificados históricamente como bajos, los cuales están ubicados geográficamente en puntos dispersos entre el río Cau-Cau y la desembocadura del río Valdivia, en la bahía de Corral.
“Cuando hablamos de potenciar nuestra comunicación estratégica, no sólo nos referimos a mejorar caminos, sino que además a fortalecer otras vías de comunicación, como la aérea y en este caso la fluvial. El dragado de las principales rutas fluviales de Valdivia es muy importante para mejorar la navegación de embarcaciones mayores. Hace más de dos décadas que no se invertía en estos tracks de desplazamiento, y con el tiempo la acumulación de sedimentos creció mucho, limitando la capacidad de nuestras vías fluviales”, dijo el seremi de Obras Públicas de Los Ríos, Jorge Alvial, quien se embarcó en la draga Ernesto Pinto (propiedad de la Dirección de Obras Portuarias) durante toda una jornada de trabajo, para actualizarse del estado del proyecto y conocer en detalle el proceso de dragado.
En total, son 2 mil 600 millones (fondos sectoriales de Obras Públicas) que permiten financiar el proyecto de conservación y limpieza del fondo de los circuitos fluviales del río Valdivia y sus afluentes, para de este modo dar mayor seguridad a la navegación de todo tipo de embarcaciones.
Actualmente, el proyecto registra un avance físico de 28% del total programado, lo que ha permitido extraer a la fecha 64 mil 460 metros cúbicos de material y sedimentos acumulados, que han obstruido la capacidad de las principales vías fluviales valdivianas en las últimas décadas.
El total programado a extraer es de 238 mil 551 metros cúbicos, material que será removido en un radio aproximado de 20 kilómetros, donde se ubican los siete sectores definidos previamente. Estos puntos son la desembocadura del río Valdivia en la bahía de Corral, la zona junto al ex vapor Canelo, Isla Sofía, la confluencia del río Guacamayo, el islote Haverbeck, la confluencia del río Cruces (aguas arriba del puente) y el río Cau Cau.
Zonas dragadas
Hasta la fecha se han intervenido tres de los siete puntos a dragar. En la zona del ex vapor Canelo se han retirado 39 mil 460 metros cúbicos, de un total programado para esa zona de 68 mil, mientras que en el sector de la Isla Sofía la extracción alcanza a 24 mil 896 metros cúbicos, de un total a remover de 28 mil.
El tercer punto corresponde al islote Haverbeck, donde recién se inició el dragado con poco más de 114 metros cúbicos retirados, de un total programado para la zona de 94 mil.
Por estos días además, comenzó la extracción en el punto más emblemático del proyecto que corresponde a la bahía de Corral, donde se encuentra la denominada Boya Alfa, cuyo despeje permitirá recuperar le vía de navegación para embarcaciones de mayor calado. Este es el caso de la gran nave construida recientemente por la empresa Asenav de Valdivia, que necesariamente requiere de un track más amplio de navegación en las zonas del ex vapor Canelo y la bahía de Corral, a fin de que pueda adentrarse en altar mar y llegar a su destino definitivo.
Beneficios
El intendente regional, Egon Montecinos valora el dragado desde el punto de vista de los beneficios que reportará para la capital regional. “Con este proyecto se está pagando una deuda histórica con Valdivia, en lo que se refiere a mejorar las condiciones de navegabilidad de sus ríos. Gracias a la limpieza del fondo de los circuitos fluviales, los ríos valdivianos volverán a quedar disponibles para el tránsito de todo tipo de embarcaciones, especialmente las de gran calado, que anteriormente estaban impedidas de navegar por estos sectores”.
“El Gobierno de la Presidenta Bachelet tiene como objetivo fomentar el desarrollo económico, y justamente en esta línea va el proyecto de dragado, ya que se verán directamente beneficiados el turismo, como asimismo la industria naviera, actividades que generan empleo en Valdivia, y que tienen una tradición de años. Además, se facilitará el transporte de carga entre Valdivia y Corral, comuna que debemos consolidar como uno de los puertos importantes del sur de Chile; y para eso es fundamental como primer paso, tener buenos accesos hacia Corral, tanto terrestres como marítimos, y en esa línea estamos trabajando en conjunto con el Ministerio de Obras Públicas”, agregó el jefe regional.
En tanto, el seremi del MOP de Los Ríos, Jorge Alvial destacó que, “una de las mejores posibilidades de desarrollo y crecimiento de la actividad económica local es, sin duda el turismo; y en este sentido el dragado de estas vías fluviales siempre aparecía como un proyecto estratégico en todas las programaciones y convenios para el desarrollo de Valdivia. Mejorar la capacidad de desplazamiento de embarcaciones de mayor calado, además de la seguridad en sus viajes, posibilita la opción de que sumen nuevas y mayores embarcaciones a los recorridos turísticos, lo que sin duda, dará un dinamismo a la actividad socioeconómica valdiviana”.
Plazos y operatividad
Las faenas de dragado se iniciaron en septiembre del año 2013, y de acuerdo a los plazos que maneja la Dirección de Obras Portuarias del MOP, se espera concluir la extracción de material de los siete puntos en julio del año 2015, completando de este modo, 18 meses de trabajos.
“Esperamos concluir el dragado de todas las zonas en julio del próximo año. No obstante, siempre es y será a un factor a considerar las condiciones climáticas, ya que con frentes de mal tiempo de mucha intensidad, la draga no puede salir a operar”, dijo la directora regional de Obras Portuarias del MOP, Elizabeth Jofré.
Esto, porque el vertimiento de los desechos que se debe realizar mar adentro de Corral, reviste cierto riesgo con malas condiciones de clima, ya que al momento de abrir las compuertas para liberar el material, la nave queda muy expuesta al oleaje (de entre cinco y seis metros), pudiendo sufrir daños.
La draga Ernesto Pinto posee una eslora de 56 metros (largo total) y trabaja con sistemas de succión en marcha, alcanzando una profundidad de dragado de 18 metros. Su modalidad de operación se realiza a través de dos mecanismos: un sistema de succión (tubo que succiona el sedimento desde el fondo) y el método clamshell o cuchara (grúa que remueve y extrae el sedimento a través de una pala). En ambos casos el material extraído, que en cada jornada varía entre 550 y 640 metros cúbicos, se deposita en la cántara o bodega de la embarcación, para posteriormente verterlo mar adentro.
“La nave está saliendo todos los días de lunes a viernes, y trabaja un promedio de 8 horas diarias. Pero debido a la imposibilidad que hemos tenido para dragar cuando las condiciones climáticas han sido adversas, se considerará la opción de salir a dragar los días sábado durante las próximas semanas, para recuperar las jornadas de inactividad y así cumplir con los plazos”, agregó la directora de la DOP, Elizabeth Jofré.